El Colegio entrega la quinta edición de este galardón a la recién graduada en la Universidad de Córdoba María Álvarez Cantos, cuyo trabajo concluye que dotando a los profesionales sanitarios de competencias lingüísticas y culturales relacionadas con la comunidad sorda se mejoraría la satisfacción y la relación terapéutica con estos pacientes.
10 de octubre de 2025.
El Colegio Oficial de Enfermería de Córdoba ha entregado este jueves la quinta edición de su Premio al Mejor Trabajo Fin de Grado (TFG), al que han optado todos los estudiantes de Grado en Enfermería de la Universidad de Córdoba (UCO) que han presentado su TFG en el curso 2024-2025. La ya enfermera recién graduada María Álvarez Cantos se ha alzado con este galardón por su TFG sobre los ‘El impacto de la realidad virtual y la tecnología en el uso de la lengua de signos en formación sanitaria”.
En concreto, el premio, dotado con 500 euros, ha sido entregado en la Facultad de Medicina y Enfermería de la UCO por la presidenta del Colegio, Natalia Pérez, en el marco de la V Jornada de Orientación Académica sobre Excelencia en el TFG organizada por la citada Facultad; en un acto que también ha contado con la asistencia del propio decano de este centro, Eloy Girela; del vicedecano para Calidad de esta Facultad y enfermero, Manuel Romero Saldaña; y de la coordinadora del Grado de Enfermería, Vanesa Cantón.

Durante la entrega del premio a esta enfermera, se ha resaltado la gran calidad de los TFG que este año han optado a esta distinción. En concreto, de todos los TFG presentados durante el pasado curso, seis han sido los finalistas, cuyos autores han expuestos sus trabajos en esta jornada de excelencia, bajo la moderación del profesor del Departamento de Enfermería, Farmacología y Fisioterapia de esta Facultad, Pedro Hidalgo.
Para una mejor atención a los pacientes con déficit auditivo
El TFG premiado refleja que las personas con déficit auditivo componen un grupo minoritario que tiene que superar muchas barreras para ser propiamente atendido en los entornos sanitarios. «La baja formación en lenguaje de signos de los profesionales sanitarios, así como los estigmas asociados, impiden una correcta comunicación y, por tanto, una peor calidad asistencial en este colectivo. Es por esto que, junto con el desarrollo de las nuevas tecnologías, como la Realidad Virtual (RV), muchos estudios plantean utilizarla como herramienta para mejorar el conocimiento de los enfermeros en la actualidad», explica María Álvarez.
Este trabajo de investigación ha surgido a raíz del proyecto europeo ISENSE Project, formado por un consorcio europeo en el que participa la UCO, precisamente para intentar dar una solución al problema planteado desde la innovación en el aprendizaje, y ha constado de dos fases. Una primera en la cual se plantea evaluar el nivel de satisfacción de las personas con déficit auditivo severo y total en el ámbito sanitario, enfocándose tanto en atención primaria, como hospitalaria y las urgencias a nivel estatal; y una segunda fase donde «se comparó mediante un estudio experimental qué metodología de aprendizaje es más eficaz entre la realidad virtual y la metodología e-learning, empleada normalmente para el aprendizaje de Lengua de Signos según muchas asociaciones», afirma esta enfermera.
Como conclusión, este trabajo ha confirmado que la satisfacción de la comunidad sorda está por debajo de la media debido a la baja adaptación del sistema sanitario a este colectivo, por lo que «dotando a los futuros profesionales de competencias lingüísticas y culturales se mejoraría la satisfacción y fortalecería la relación terapéutica entre pacientes, intérpretes y profesionales sanitarios». Además, los hallazgos en la citada fase segunda demuestran el valor de la realidad virtual como una potente herramienta educativa para la enseñanza de la Lengua de Signos Española. «La naturaleza inmersiva e interactiva de la Realidad virtual mejora la adquisición de habilidades, la empatía y la comprensión cultural de los estudiantes», resalta este TFG.
Tras recibir el premio, María Álvarez también ha querido destacar el apoyo que ha recibido para desarrollar su trabajo por parte de la Asociación Provincial de Personas Sordas de Córdoba, que «nos acogieron en su sede y nos mostraron una visión completamente diferente sobre las verdaderas necesidades, desafíos y fortalezas de la comunidad sorda, inspirándonos a seguir trabajando por una formación sanitaria más inclusiva y accesible para todos».
Cinco ediciones
Además de este trabajo ganador, los TFG finalistas han versado sobre el ejercicio del rol del cuidador primario de un paciente con demencia, sobre la efectividad del uso de exoesqueletos en personas con alteración de la movilidad, sobre el impacto psicológico durante la fase de puerperio, sobre la calidad de vida de pacientes pediátricos diagnosticados con TDAH, y en torno a la comparación de la satisfacción laboral en el medio comunitario de la Enfermería Familiar y Comunitaria y de la de Instituciones Penitenciarias.
Este Premio al Mejor TFG se enmarca dentro de las iniciativas del Colegio de fomento y apoyo a la investigación enfermera. La primera edición de estos Premios, del curso 2020-2021, fue para María Victoria Juan Campos por su trabajo sobre la efectividad de la musicoterapia en enfermos de Alzheimer; la segunda, para Cristina Fierro, que ganó con un trabajo sobre el estado de salud mental de los estudiantes de Enfermería de la Universidad de Córdoba; la tercera, fue para Virginia Prieto Crespo, por su trabajo sobre el impacto de las intervenciones de ayuda espiritual en los pacientes paliativos; y el pasado curso el galardón fue para Paula López Moreno, por su TFG sobre los efectos emocionales del estigma del sobrepeso que alertaba de que la gordofobia y discriminación ejercida sobre las personas con sobrepeso puede dar lugar a trastornos de la salud mental.